Cuando en Europa todavía resuenan los ecos de la victoria de Conchita Wurst, a Londres llega la séptima -y por ahora parece que será la última- edición del West End Eurovision. Se trata de un evento organizado por The Make a Difference Trust que este año se celebró el pasado 22 de mayo.
En él, los mejores musicales de la ciudad se reúnen para una batalla muy especial: cada compañía elige una canción que haya sido representada en alguna de las ediciones del festival de Eurovisión y, dándole su propio toque personal con coreografías y vestuario propio, deleitan al público con el único fin benéfico de recaudar fondos en la lucha contra el VIH/SIDA.
El teatro que acoge este evento desde hace ya varios años es el Dominion Theatre, hogar de We Will Rock You, que cierra sus puertas el próximo 31 de mayo después de 12 años en cartel. West End Eurovision comienza a las once y media de la noche, una hora apropiada para que todos los amantes del teatro puedan asistir, así como sus actores, que cierran sus propios espectáculos a las diez. Las actuaciones se suceden hasta pasadas las dos de la mañana, momento en el que la competición benéfica da paso a una fiesta posterior, que en esta ocasión terminó cuando ya el día había ganado la batalla a la noche.
El concurso cuenta con sus propios jueces. La responsabilidad este año recayó en Rylan Clark, famoso por su participación en el X Factor de UK y por ganar el Celebrity Big Brother; Graham Norton, uno de los más famosos presentadores de la televisión británica que cuenta con su propio show; además de Lesley Joseph y Caroline Quentin, dos famosas leyendas del West End. El público también ejerce su propio voto, pero hay más: un segundo panel compuesto por miembros de los propios musicales dará su veredicto, que se divide en distintas categorías.
La primera de ellas premia al mejor vídeo de presentación -lo que ellos denominan como ‘ident’- que se proyecta antes de la canción. El ganador de este año ha sido el vídeo presentado por The Book of Mormon. La segunda categoría premia la originalidad, que este año recayó en MAMMA MIA!, y por último llega el premio grande: ¡la mejor actuación! Pero de ella hablaremos un poco más abajo.
En esta edición contamos con la presencia en el escenario de Beverly Knight con la compañía de The Bodyguard -el musical en el que estará representando hasta el 31 de mayo el papel que en su día interpretara Whitney Houston en la pantalla- y con Kim Ismay de MAMMA MIA! formando parte del jurado de su equipo, entre otras muchas leyendas del West End.
Al igual que en el formato eurovisivo, tras ver nueve maravillosas actuaciones y un resumen de las mismas, las líneas se abrieron para que la audiencia votase por su favorito. La espera fue amenizada por Sonia Evans, actriz del elenco original de Grease y que además representó a Reino Unido en Eurovisión en 1993 consiguiendo un segundo puesto. ¿Su canción? Better The Devil You Know.
Tras cerrar las líneas llegamos a las votaciones finales con tres actos claramente en cabeza: el Waterloo del ‘cast’ de MAMMA MIA!, que optó por versionar imitando los distintos musicales del West End; Flying the Flag interpretada por Les Miserables, que vestidos de compañía aérea nos deleitaron en el escenario con una coreografía única, en la que no podía faltar la bandera francesa; y Ding-A-Dong, por la compañía de The Book of Mormon, que siguiendo su video de presentación nos trasladaron a África para descubrir a un grupo de amas de casa acompañadas por bailarines.
Una vez los jueces y las compañías finalizan sus votaciones, con Les Miserables en cabeza, el voto del público fue decisivo para que, por primera vez en la historia del West End Eurovision, se produjera un empate entre los anteriores y MAMMA MIA! Ambos grupos se fundieron en un efusivo abrazo en el escenario, donde se alzaron con un premio compartido que, empleando las palabras del ganador del año pasado, no lo cambiarían «ni por oro”.
Congratulations to Les Miserables and @MammaMiaEuro for their win last night at #WEE14 #WestEndEurovision @MADTrust pic.twitter.com/vrItTvEOHM
— Rob Young (@robyoung) Mayo 23, 2014
Si te gusta Eurovisión y además te gusta el teatro, esta es tu cita ideal. La gente de MAD sube las actuaciones a su canal de YouTube, donde pronto estarán disponibles las de esta edición. Por lo de pronto puedes echar un vistazo a las estupendas fotos de Chris Jepson.
Además de lo absolutamente especial de una noche como esta, conviene recordar que está movida por una buena causa cuyo objetivo final es recaudar fondos. ¡Cualquiera puede colaborar! Para más información visita su página web: www.madtrust.org.uk